Estamos hechos de experiencias. (Mal que nos pese).Nuestras experiencias nos cincelan, con forma humana, o lo que es peor, con esa forma con la que aparecemos ante los demás. Y los otros -el resto del mundo que nos rodea- a veces mete mano a esto que somos, y otras veces no los dejamos meterse, o lo que es peor, en oportunidades se lo permitimos a algunos que no saben cuidarnos, no lo llevan registrado en su ADN experiencial.
La experienca se inscribe en nosotros a partir de "la palabra" de quienes nos criaron, creemos en "eso" que nos dicen que somos, y que seremos. Hasta que ha de llegar el instante en que necesitamos poner a prueba eso que nos creímos que somos. (Le encontramos el gustito a la experiencia).
Mas luego sentimos todas las sensaciones de lo vivído (de manera inconciente) producto de un balance operativo entre: vivencias positivas y negativas.
Despues ponemos a pensar lo aprendido de ellas -objetividad creciente- y definimos nuevas experiencias a conseguir (y vamos a su encuentro)
Hasta que finalmente en el hacer ejecutamos y realizamos aquellas conductas que previamente analizamos y definimos como satisfactorias para llevarlas a cabo. Esto nos puede llevar toda la vida.
El único imprevisto (y lo mas emocionante) de todo este camino han de ser los otros, los demás. Que, en mayor o menor medida estan sintiendo-pensando-haciendo otro recorrido experiencial. Tan novedoso como el nuestro. Lo que no vamos a poder predecir son las necesidades tanto nuestras como la de los otros y que van a ponerse a confrontar pero que han de medir la calidad de nuevos encuentros y desencuentros.
Por esto vale la "generalización" de la primera frase de esta reflexión: Estamos hechos de experiencias.
¿Por qué? . Muy sencillo. Porque los otros y nosotros somos unicos e irremplazables para llevar a cabo la construcción de una experiencia siempre a cotejar, a compartir y a disfrutar.
Sin los otros, no hay experiencia posible.
Sin experiencia, no vamos al encuentro de los demás.
Mi humilde propuesta sería asombrarse, intercambiar ideas - aunque por momentos te parezcan un poco viejas - y que puedan ser pensadas de nuevo. Ponerlas "en cuestión". En otras palabras...: Construir un espacio "tierno" para contrarestar "lo cruel" que viene ofreciendo el sistema desde hace mucho. Desandar los significantes ya gastados para caminar otros senderos
jueves, 9 de julio de 2009
Genealogía de la experiencia
Suscribirse a:
Entradas (Atom)